Las nuevas medidas preventivas para las vacaciones de Pascua impondrán severas restricciones sobre la compartición de les mones con tal de evitar la expansión del coronavirus durante estas celebraciones de Semana Santa y evitar las aglomeraciones alrededor de este típico dulce.

Se pone así en marcha el operativo de seguridad de Pascua donde advierten que la vigilancia se extenderá no solo a les monetes, sino a cualquiera de las variantes panquemado o panquemao, aplicándose las mismas limitaciones según indica el comunicado oficial porque «la única diferencia es que a la mona se le puede dar forma de animal, un cocodrilo o una serpiente, de flor o de lazo, y siempre va adornada con un huevo cocido».
También se ha anunciado que las autoridades intensificarán los controles durante la franja horaria del «berenar», emitiendo cuantiosas multas a todos aquellos que compartan su mona con premeditación, alevosía, o incumpliendo la distancia de seguridad, tanto al aire libre como en interiores.
En respuesta a la polémica y protestas originadas en la población, se ha hecho un llamamiento a «ser fuertes y mirar hacia el futuro», poniendo como ejemplo anteriores pascuas donde la ausencia de viento generó dramáticas situaciones en las que «Pepito plorava perquè el catxirulo no se li empinava», por lo que las soluciones entonces y ahora deben basarse en valores de «almuerzo esfuerzo y resignación».